domingo, 1 de enero de 2012

Capítlo 3

Tropecé con el y dentro de mi alguien decía: Mierda mierda mierda. Por fuera estaba muy roja. Con mucha vergüenza y miedo, pero a la vez intentando parecer normal  dijo: ¿Tú por aquí?-  A lo que contesté si voy a casa de Luis- Me detuve a pensar y caí en que era su compañero de instituto. Puesto que debía decir algo le dije -Esta tarde tenemos  cena, ¿No?- Tardó en contestar - Exacto, ¿Irás?- Sin pensarlo un instante contesté- Claro, supongo- ¿Te pondrás guapa?- Me dijo- Claro que sí, al igual que tu supongo- Sonrió, y dije- Ya nos vemos esta noche- A lo que contestó- Esperaré que vengas más guapa de lo normal, si es posible- A lo que sonreí con ilusión y dije- Hasta luego-.
Seguía caminando orgullosa de  haberme encontrado con él,  me había alegrado el día, ya no  me preocupaba lo que me dijesen mis padres.

Todo es tan superficial.

Todo es tan superficial...
que solo pienso en que la gente me vea como yo quiero
que  me creo algo que no soy
que miro una "realidad" que no existe, solo es mi mundo, lo que yo quiero como yo lo pinto, y como yo lo quiero pintar.
que me dejo llevar por la supercifialidad
y no me doy cuenta de lo que realmente importa, para muchas personas   lo que la  gente piense de ellos, y a veces soy de esas, y me arrepiento.